Buscar este blog

57. Nuestra Escuela REDACTA

         PRIMER ENSAYO DEL BACHILLER (Iii)

3.  PROPEDÉUTICA LITERARIA (B)

6. Otros poemas notables sobre la NOCHE

1.       Noche oscura del alma”
2.       Noche de la fe
3.       La noche y el poeta romántico
4.       En la noche nos visitan fantasmas alegres
5.       Noche: cansancio y muerte, oración, doliente
6.       Noche: desolación
7.       Noche: para el amor secreto que no sabe nadie
8.       La noche de los que se separan
9.       Noche de Bécquer
10.   Noche y sueño
11.   Noche de Todos los Santos
12.   Noche e ilusiones de corazón adentro
13.   Noche, semilla del día

·         Al poeta, si de hecho lo es, se le ha dado entrada laboriosa, pero libre, a la entraña de las realidades. A variados poemas que ha producido la historia de la literatura habrá de ir a buscar el aprendiz de ensayista, en el caso concreto de la noche, la entraña de la noche sobre la que versa su ensayo.
Uno a uno, los poemas bien seleccionados los llevará a la mesa de operaciones, les someterá al túnel de las resonancias magnéticas, les hará placas de rayos X y, por seguir la alegoría médica, les extenderá la ficha completa de su natural expresión espontánea y más interior, fenómeno y noúmeno.
De un poema a otro habrá que variar la técnica de análisis, como quería Dámaso Alonso, para que no se le escape la revelación que supone la singular intuición poética de cada autor sobre el fenómeno de la noche.
·         El aprendiz de ensayista encontrará informaciones que le den pistas en su labor de asalto a la noche desde el poema. Le serán útiles. Habrá de comprobar su carga de verdad y anotarla. Aquí le apuntamos algunas informaciones sueltas. Él habrá de sistematizar lo que encuentre de valioso y elaborar con esas ajenas informaciones y su criterio personal, la entraña y las características de la noche en cada poema.
·         Para mayor inteligencia del poema, le ayudará al aprendiz establecer un correlato con otras formas de expresión que no sean las literarias (música, escultura, arquitectura, pintura…), como se hace aquí con la oda a la noche de José Luis Borges: encontrarle verso a verso una foto que los exprese uno a uno.

1.      NOCHE OSCURA DEL ALMA
San Juan de la Cruz, místico reformador del Carmelo con Santa Teresa, doctor de la Iglesia, sabe que los principiantes de la vida interior religiosa progresan en perfección atravesando la “noche del sentido”, que les purifica y alcanza “la divina unión con Dios” a través de tremendas purificaciones  en que consiste la “noche del espíritu”.
Más allá de esta oscura noche del sentido y del espíritu, “horrenda noche”, pasadas las moradas sexta y séptima de Santa Teresa, está la “unión transformativa” y así la noche oscura resulta también noche maravillosa, “amable más que la alborada”.

En una noche escura,
con ansias en amores inflamada,
¡oh dichosa ventura!,
salí sin ser notada,
estando ya mi casa sosegada.
A escuras y segura
por la secreta escala, disfrazada,
¡oh dichosa ventura!,
a escuras y en celada,
estando ya mi casa sosegada.
En la noche dichosa,
en secreto, que nadie me veía
ni yo miraba cosa,
sin otra luz y guía
sino la que en el corazón ardía.
Aquesta me guiaba
más cierto que la luz del mediodía,
adonde me esperaba
quien yo bien me sabía,
en parte donde nadie parecía.

¡Oh noche, que guiaste;
oh noche amable más que el alborada;
oh noche que juntaste
Amado con amada,
amada, con el Amado transformada!
En mi pecho florido,
que entero para él solo se guardaba,
allí quedó dormido,
y yo le regalaba
y el ventalle de cedros aire daba.
El aire del almena,
cuando yo sus cabellos esparcía,
con su mano serena
en mi cuello hería
y todos mis sentidos suspendía.
Quedéme y olvidéme,
el rostro recliné sobre el Amado;
cesó todo y dejéme,
dejando mi cuidado
entre las azucenas olvidado.

San Juan de la Cruz, Noche oscura del alma

2.      NOCHE DE LA FE
San Juan de la Cruz compone los siguientes versos de inquietante belleza y fuerza interior en la larga noche de su prisión en Toledo. La fe ilumina su noche.
La experiencia es mística. Orden superior. El alumno lee lo que tiene delante, el caso de una joven (la amada o la esposa) que desea el amor de su amado o esposo. Y ha de ver a lo que el poeta simboliza, al alma que se alegra de conocer a Dios en la noche de la fe, conocimiento divino.  
“Fuente y noche”, contradictorias, transparencia y oscuridad.
El agua que sale de la roca es como el surgir del misterio. La noche fuerza oculta que fermenta el devenir. En San Juan de la Cruz nunca es negativa.
Siempre es de noche para la fe.


¡Qué bien sé yo la fonte que mana y corre,
aunque es de noche!

I
Aquella eterna fonte está ascondida.
¡Que bien sé yo do tiene su manida
aunque es de noche!
II
Su origen no lo sé pues no le tiene
mas sé que todo origen della viene
aunque es de noche.
III
Sé que no puede ser cosa tan bella,
y que cielos y tierra beben della
aunque es de noche.
IV
Bien sé que suelo en ella no se halla
y que ninguno puede vadealla
aunque es de noche.
V
Su claridad nunca es escurecida
y sé que toda luz de ella es venida
aunque es de noche.
VI
Sé ser tan caudalosos sus corrientes,
que infiernos cielos riegan y a las gentes
aunque es de noche.
VII
El corriente que nace desta fuente
bien sé que es tan capaz y omnipotente
aunque es de noche.
VIII
El corriente que de estas dos procede
sé que ninguna de ellas le precede
aunque es de noche.
IX
Aquesta eterna fonte está escondida
en este vivo pan por darnos vida
aunque es de noche.
X
Aquí se está llamando a las criaturas
y de esta agua se hartan, aunque a escuras
porque es de noche.
XI
Aquesta viva fuente que deseo
en este pan de vida yo la veo
aunque es de noche.




3.      LA NOCHE Y EL POETA ROMÁNTICO
El poeta romántico reacciona sentimentalmente frente a la noche. No la desentraña. Le conmueve.


CHOPIN NOCTURNO

A mi amigo el notable pianista Narciso L. Salicrup
(en su día - 1893)

Es media noche... la vecina selva,
la playa, el monte, el mar... todo es silencio!
Y el artista, la frente enardecida,
en el jardín, a solas con sus sueños.

Como notas de luz en el pentagrama
inmenso de los cielos,
se miran las estrellas esparcidas
por el Eterno Artista... Los abetos,
los pinos melancólicos, los sauces,
como a gigantes liras hiere el viento;
¡Extraña sinfonía de los bosques
acompañando el himno de los cielos!

Puesto el oído al eco de la noche,
a la voz de las ondas y los vientos,
viajera el alma en el país brumoso
de lejanos, tristísimos recuerdos,
el grande artista sueña... ya lo invade
la inspiración del genio,
la encarnación del arte
ya informa el ideal de su cerebro...

Después... febril, apasionado, loco,
luz en los ojos y en la frente fuego
intérnase en la sombra
el gran salón desierto...
Y acariciando el piano adormecido
le cuenta sus ensueños...
Escuchad!... ¡es el canto de los astros,
la armonía del alma y de los cielos!

Carlos Borges, venezolano

4.      EN LA NOCHE NOS VISITAN FANTASMAS ALEGRES

El poeta romántico siente la noche y reacciona ante ella sin penetrar dentro de su realidad. Vaga y le rodea y envuelve la noche y, libre, se deja llevar de su fantasía.

Con frecuencia le gustan los ambientes nocturnos de tenue encanto, los ensueños, lo crepuscular, indefinido y mágico.
Zorrilla, que es siempre musical, ve así a la noche:


                                              Me han dicho que en la noche silenciosa
               Los espíritus vagan en el viento,
               Que flotan en la niebla misteriosa
               Sílfides blancas de aromado aliento,

                   Que las aéreas sombras bienhadadas
               De los que eran aquí nuestros amigos,
               Vienen sobre las brisas desatadas,
               Del nocturno reposo a ser testigos.

                   Me han dicho que en los bosques apartados,
               En las márgenes frescas de los ríos,
               Por el agua y las hojas arrullados,
               En torno de los árboles sombríos,

                   Danzan alegres, de su paz gozando,
               Y a los que en vida, con afán querían,
               Desde la turba de su alegre bando
               Ilusiones dulcísimas envían.

                   Y dicen que esos son los halagüeños
               Fantasmas que en la noche nos embriagan,
               Esos los blancos y amorosos sueños
               Que en nuestra mente adormecida vagan.

                   Tal vez será verdad; vendrán acaso
               Nuestra vida a endulzar esas visiones,
               Y de una estrella al resplandor escaso,
               Entonarán sus mágicas canciones.

                   Sí; tal vez a sus madres amorosas
               Colmarán de purísimos cariños
               Las transparentes sombras vaporosas
               De los risueños inocentes niños.




5.      NOCHE, CANSANCIO Y MUERTE, ORACIÓN, DOLIENTE

La poetisa chilena le abre un campo de imágenes nuevo a la noche, la Pasión y Muerte de Cristo, negra noche, humana noche del alma paralela a la noche de la Pasión y Muerte.
Mira a sus adentros y ve desfilar, con detalles concretos –costado abierto, el beso de Judas, el lienzo de la Verónica…-, dentro de su amargura el relato de la pasión de los evangelistas.
En la Pasión de Cristo Dios se ha olvidado de su Hijo, lo ha abandonado.
Su pregunta síntesis del poema es la misma: “¡Padre… por qué me has desamparado!”

         NOCTURNO

Padre Nuestro, que estás en los cielos,
¡por qué te has olvidado de mí!
Te acordaste del fruto en febrero,
al llagarse su pulpa rubí.
¡Llevo abierto también mi costado,
y no quieres mirar hacia mí!

Te acordaste del negro racimo,
y lo diste al lagar carmesí;
y aventaste las hojas del álamo,
con tu aliento, en el aire sutil.
¡Y en el ancho lagar de la muerte
aun no quieres mi pecho oprimir!

Caminando vi abrir las violetas;
el falerno del viento bebí,
y he bajado, amarillos, mis párpados,
por no ver más enero ni abril.

Y he apretado la boca, anegada
de la estrofa que no he de exprimir.
¡Has herido la nube de otoño
y quieres volverte hacia mí!

Me vendió el que besó mi mejilla;
me negó por la túnica ruin.
Yo en mis versos el rostro con sangre,
como Tú sobre el paño, le di,
y en mi noche del Huerto, me han sido
Juan cobarde y el Ángel hostil.

Ha venido el cansancio infinito
a clavarse en mis ojos, al fin:
el cansancio del día que muere
y el del alba que debe venir;
¡el cansancio del cielo de estaño
y el cansancio del cielo de añil!

Ahora suelto la mártir sandalia
y las trenzas pidiendo dormir.
Y perdida en la noche, levanto
el clamor aprendido deTi:
¡Padre Nuestro, que estás en los cielos,
por qué te has olvidado de mí!

                                                        Gabriela Mistral, chilena

6.      NOCHE: DESOLACIÓN

NOCTURNO

Soledad, silencio y sombra
que mis pensamientos surcan
con temblor de fuegos fatuos...
El corazón de la noche
se pulsa en el monorritmo
de la canción de los grillos...

Cuando la luna se asoma,
por el silencio del campo
echo a andar como un autómata...

Tras de mí, la luna llena;
delante de mí, mi sombra,
y la única realidad
en el ámbito del mundo,
es ese gris de mi sombra
circundada por un nimbo
fosforescente de luna,
la música de los grillos,
una arboleda lejana,
y el gravitar de los astros
sobre mi cuerpo fantasma.





                                                                            M. A. OSORIO J., venezolano






7.      NOCHE PARA EL AMOR SECRETO QUE NO SABE NADIE









REVELACIÓN

¡Cómo volaba el pensamiento mío!...
Fue un dulce anochecer. Se adivinaba
por su rumor, bajo la peña, el río,
y la mano del viento preludiaba
un aria triste en el pinar sombrío.

Como una bruma de melancolía,
no sé qué dulce calma bienhechora
pasó rozando con el alma mía...
Tú que en mí estás, mujer a toda hora,
¡nunca has estado en mí como aquel día!

Quise gritar mi pena.

Y ante la soledad de los caminos
alfombrados de luna y la serena
quietud de muerte de la noche, llena
de olor de flores y rumor de pinos,
" ¡La quiero! ", dije con fervor sincero.
" ¡La quiero! ", repetí y el aire blando,
con un rodar de voces, fue gritando
desde la sierra hasta el pinar: " ¡La quiero!..."

Callé y calló la noche. El alma mía
volvió a encerrarse en la melancolía
de este secreto amor hondo y austero,
que nadie sabe y del que nada espero...
¡Sólo lo supo el agua que corría
y una flor desvelada, que tenía
una cita de amor con un lucero...!






JOSÉ MARÍA PEMÁN









8.      LA NOCHE DE LOS QUE SE SEPARAN



En las despedidas hay una última noche, casi siempre. Nadie ha sabido expresar con más fidelidad ni más hondura que Rosalía de Castro el sentimiento del alma gallega. Sus notas son de una tristeza indecible. “Melancolía” es el nombre de la musa que la emigración y la noche hacen más dolorosa.



Era la última noche,
la noche de las tristes despedidas,
y apenas si una lágrima empañaba
sus serenas pupilas.
Como el criado que deja
al amo que le hostiga,
arreglando su hatillo, murmuraba
casi con la emoción de la alegría:

—¡Llorar! ¿Por qué? Fortuna es que podamos
abandonar nuestras humildes tierras;
el duro pan que nos negó la patria,
por más que los extraños nos maltraten,
no ha de faltarnos en la patria ajena.

Y los hijos contentos se sonríen,
y la esposa, aunque triste, se consuela
con la firme esperanza
de que el que parte ha de volver por ella.
Pensar que han de partir, ése es el sueño
que da fuerza en su angustia a los que quedan;
cuánto en ti pueden padecer, oh, patria,
¡si ya tus hijos sin dolor te dejan!






En las orillas del Sar, Rosalía de Castro



9.     LA NOCHE DE BÉCQUER





Rima LXV

Llegó la noche, y no encontré un asilo,
¡y tuve sed!... mis lágrimas bebí,
¡y tuve hambre! ¡Los hinchados ojos
cerré para morir!
¿Estaba en un desierto? Aunque a mi oído
de las turbas llegaba el ronco hervir,
yo era huérfano y pobre... ¡El mundo estaba
desierto... para mí!



Las largas noches de invierno, avivan el recuerdo de la persona querida que se fue y la hacen más doliente.

Rima LXXIII

En las largas noches 
del helado invierno, 
cuando las maderas 
crujir hace el viento 
y azota los vidrios 
el fuerte aguacero, 
de la pobre niña 
a veces me acuerdo.









          
    10.   NOCHE Y SUEÑO

La noche es para dormir.
El poeta, niño que se asombra de todo, nos dice con versos modernistas quién duerme a media noche.

A MEDIA NOCHE

Bate el remo con golpe soñoliento
los cristales purísimos del lago; ,
en el ramaje misterioso y vago
cuelga su lira el perezoso viento.

Besa el río callado y macilento
las dormidas riberas con halago,
y la fronda confusa ofrece en pago
desmayado dosel a su elemento.

Todo duerme; los astros que declinan,
los torrentes, las selvas, las cascadas,
los mares que en las playas se reclinan.

¡Y allá sobre las tumbas olvidadas,
los sauces melancólicos se inclinan
dando extrañas y lentas cabezadas!

                                                     Piedras Preciosas, Salvador Rueda


11.   NOCHE DE TODOS LOS SANTOS




El 1 de noviembre se celebra la festividad de Todos los Santos. El día 2, la Conmemoración de los Fieles Difuntos. En la noche del 1 al 2 de noviembre doblan las campanas, tocan a muerto: es la noche de difuntos.








Vientro negro, luna blanca...
   Viento negro, luna blanca.
Noche de Todos los Santos.
Frío. Las campanas todas
de la tierra están doblando.
   El cielo, duro. Y su fondo
da un azul iluminado
de abajo, al romanticismo
de los secos campanarios.
   Faroles, flores, coronas
– ¡campanas que están doblando! –
...Viento largo, luna grande,
noche de Todos los Santos.
...Yo voy muerto, por la luz
agria de las calles; llamo
con todo el cuerpo a la vida;
quiero que me quieran; hablo
a todos los que me han hecho
mudo, y hablo sollozando,
roja de amor esta sangre
desdeñosa de mis labios.
   ¡Y quiero ser otro, y quiero
tener corazón, y brazos
infinitos, y sonrisas
inmensas, para los llantos
aquellos que dieron lágrimas
por mi culpa!
                    ...Pero, ¿acaso
puede hablar de sus rosales
un corazón sepulcrado?
   – ¡Corazón, estás bien muerto!
¡Mañana es tu aniversario! –
   Sentimentalismo, frío.
La ciuded está doblando.
Luna blanca, viento negro.
Noche de Todos los Santos
.
Juan Ramón Jiménez, Jardines lejanos



      12.   NOCHE E ILUSIONES DE CORAZÓN ADENTRO
La noche para el poeta de “Campos de Castilla”, tan sobrio, tiene a veces una fuente que mana ilusiones nunca experimentadas, abejas que fabrican miel con viejas amarguras, sol ardiente y, más dentro, al final, a Dios en el corazón del hombre.

 Anoche cuando dormía 
soñé ¡bendita ilusión! 
que una fontana fluía 
dentro de mi corazón. 
Dí: ¿por qué acequia escondida, 
agua, vienes hasta mí, 
manantial de nueva vida 
en donde nunca bebí? 

Anoche cuando dormía 
soñé ¡bendita ilusión! 
que una colmena tenía 
dentro de mi corazón; 
y las doradas abejas 
iban fabricando en él, 
con las amarguras viejas, 
blanca cera y dulce miel. 

Anoche cuando dormía 
soñé ¡bendita ilusión! 
que un ardiente sol lucía 
dentro de mi corazón. 
Era ardiente porque daba 
calores de rojo hogar, 
y era sol porque alumbraba 
y porque hacía llorar. 

Anoche cuando dormía 
soñé ¡bendita ilusión! 
que era Dios lo que tenía 
dentro de mi corazón.
Antonio Machado, Humorismos, fantasías, apuntes

13.   LA NOCHE, SEMILLA DEL DÍA



Al poeta hispanoamericano le entusiasma la noche. Compone una oda. En su poema recogemos poéticos datos para nuestra NOCHE. 


Una foto precisa, verso a verso, bien elegida, para cada concepto del poema. 


                                                                         ODA A LA NOCHE
Noche,
Noche mía,

Noche de todo el mundo,
tienes algo
dentro de ti, redondo
como un niño
que va a nacer
como una semilla
que revienta,
es el milagro,
es el día.

                              José Luis Borges



CARLOS URDIALES RECIO
Maestro. Especialista en expresión escrita
Emérito UCJC

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Envíanos tus comentarios

117 AFDA

        ÍNDICE  PRINCIPAL                              ____________________________________   Pregón:  Educación y expertos. Libertad       ...